6 de noviembre de 2008

Alguna vez...

... tendría que contar las andanzas de un sócrates o platón arrabalero que conozco bastante bien, cliente de bares, normal y saludablemente ebrio, que va diciendo a quien no le quiere escuchar cómo debe ser y no es la educación de los políticos. Admira a Pessoa y desearía (en sueños) ser tan borrachín y triste como él.

1 comentario:

Egoficción dijo...

Lo de los políticos no tiene remedio. Lo de ser más borrachín, sí.