Hemerotecas

¿Hace falta creer en los periodistas "de derechas" para pensar que esto no va bien- y que el gobierno se aboca al desastre, quizás con culpas e inocencias repartidas? (Yo me entiendo, creo...)

S. Bellow, El planeta de Mr. Sammler..

L. Durrell, Antrobus. Ese supremacismo british hasta en el sentido del humor. Sobre todo en él. Con él, a través de él..

Un cuadro, Ruisdael

El río y la iglesia. Haga Vd. circular sus metáforas..

L. Durrell, Antrobus..

Lisboa. Reciclando, reutilizando, rehabilitando, reviviendo, etc. espacios..

Notas de lectura: ¿Hay algo de ingenuidad en lo que D. Lessing sostiene? Esto es, que los gobiernos democráticos no emplean adecuadamente el conocimiento adquirido en el último siglo acerca del comportamiento grupal y gregario de los seres humanos? ¿Impostación de la ingenuidad tal vez? ¿Tengo un recuerdo falso de lectura, quizás por leer demasiado rápido y/o apresurado?

El libro de Torga, breve, merece una segunda lectura. Para calibrar bien las partes de afecto, de ironía y, también, mala leche que se integran en esa prosa poética paisajística y humana..

Itinerancias.

Tiene la prosa de M. Torga, en Portugal, un no sé qué de falangista que supongo que será cosa del zeitgeist (1950).

(D. Lessing, Las cárceles que elegimos.)

Domingo. Calor. Se ordena. D. Lessing, L. Durrell. Poco más..

(D. Lessing, Las cárceles que elegimos)

... para esas fechas, la dictadura franquista empezaba a superar el aislamiento inicial y la horrible crisis económica, el hambre, la pobreza y la miseria -la tuberculosis se convirtió en enfermedad nacional- que siguieron a la Guerra Civil. En esos años tristes estuvimos más solos que la una, entregados a nuestros magros recursos y con las orejas gachas, sin otra ayuda exterior que la que prestaron, y eso no hay que olvidarlo nunca, Portugal y Argentina. Para el resto del mundo fuimos unos apestados. (A. Perez Reverte, en El Semanal)

Hemerotecas

Bochorno. Aparte, exhumarán los restos del dictador.

... una toalla listada y una historia de la arquitectura, de Penguin, manchada y roída por las aguas marinas, se encontraban sobre un asiento hecho con el tronco de una palmera. (L. Durrell, Limones amargos)

¿Qué historia de la arquitectura?

Un libro de L. Durrell y otro de M. P.

Hobbesiana

"La libertad política del súbdito era una consideración secundaria cuando no se podía ofrecer la simple seguridad de la persona en la calle." (L. Durrell, Limones amargos)

¿Es que no?

Hemerotecas

“Lo que me parece con esta polémica es que, al final, el trasfondo es el de desprecio y de la poca importancia que tiene la cultura en la agenda presidencial y, sobre todo, la cultura de la música más joven. Estoy seguro de que, si en vez de ir a un festival de música hubiera ido a cualquier otra cosa, este tema ni habría salido en prensa”, ha lamentado en una entrevista con Europa Press el ministro.

Sostenella.

Bajada.

Solo recuerdo que no recuerdo nada. (Pseudosócrates)

Murió V. Verdú.

Hemerotecas

¿Puede un partido con un 25% de la Cámara, y un 20% del cuerpo electoral, gobernar por decreto, a fin de soslayar la acción judicial directa?  No, no debería. Si quiere un bien distinto del pan pírrico para hoy..

Celebra Espénglerez la revelación de Menéndez Pelayo: la esencial catolicidad de España, en la que se deben incluir sin desdoro los indiferentes. Pero nada más.

Un mœmento pictórico

(Van Gogh, Olivar, 1889)

Antihemerotecas

Cualquiera debe interesarse en aliviar la flaqueza y debilidad de la infancia, facilitando los primeros pasos de su instrucción sin que lo eche de ver el niño, que debiendo comenzar a deletrear hacénsele arduos y penosos tales principios. 

Para endulzárselos, por decirlo así, y empeñar al mismo tiempo su fantasía, hay quien imaginó poner a los niños en un cuarto a oscuras y presentarles en la pared un lienzo o papel con las letras o sílabas iluminadas, lo que se consigue poniendo una luz detrás del papel dado de aceite.

El niño, no estando distraído de otro objeto y halagado de la vista de las letras iluminadas, no abandona el objeto de su lección, antes bien llama su curiosa atención, lo que le facilita retener en la memoria aquellas señas que se imprimen mejor por la vista en su fantasía. Se han hecho varias experiencias sobre esto con niños de diversos talentos, con éxito feliz. (Un texto de 1801, vía elcafedeocata)

Una actualización positiva de la caverna platónica. La experiencia de la cueva a manera de momento fundacional e instrumental de la ontogénesis/filogénesis educativa..

Entre estar en vanguardia (o sea, a la moda) y leer, v. gr., a Menéndez Pelayo, uno no alberga dudas.

Hemerotecas

Hará mal la socialdemocracia en reinventar el frentepopulismo. Ya no digamos de esos tics totalitarios si se fijan por decreto..

Hemerotecas

Cualquier día se reinstituye el duelo.

Una modesta verdad

M. M. P., Historia de los heterodoxos españoles, p. 1031

Hemerotecas

Pedro Sánchez quita el escudo y la bandera españoles en su recuerdo a las víctimas en catalán (El Mundo)

Estas sensibilidades que ofenden...

Al hilo de los heterodoxos:

I ¡Gloria al genio inmortal! Gloria al profundo Darwin, que de este mundo penetra el hondo y pavoroso arcano! ¡Que, removiendo lo pasado incierto, sagaz ha descubierto el abolengo del linaje humano. ("A Darwin", Núñez de Arce; siguen otras 25 estrofas.)

M. P., sus heterodoxos. Aunque al final sus ortodoxos son los que se salen de lo correcto.

Antiguas verdades y viejas buenas nuevas

¿Quién dice que la moral no cuenta? Y que no importa la conciencia... Pero allí donde haya inquisición habrá superioridad moral y una conciencia inflada de sí misma. La ley, la letra, eso es lo que no cuenta. Simple superficie soslayable para el poseedor de la verdad.

Páginas de los Heterodoxos de M. P.: Los infames krausistas vs. Balmes & Donoso..

E. Vuillard, El orden del día..
Terrible. De obligada relectura. Para creer en alemanes.

La vida más simple requiere las palabras más justas.
La vida desnuda, el silencio.

Domingo, nada. Paraheideggeriano estado de-tirado.

Granada, desde Víznar

Forclusiones

Las guerras inciviles comienzan con las ideas. Esto es, con las creencias vergonzantes. Esto es, con las reacciones fisiológicas enquistadas.

Impresión de derrota. ¿Por qué?
(Por nada, por mucho. Por los años, por el cuerpo. El alma no es más que un exudado poco glorioso del cuerpo. Aristotelismo de arrabal. No la estructura teleológica, sino un pobre emergencia, un subproducto de raíz paracristiana. Quizás un vestigio poco recomendable de la culpa.)

Tregua aparente del calor.

Heracliteana

Ni tienen vergüenza ni quieren conocerla..
(Decir de otro, pero -¿por qué no?- también decir de uno mismo, como posibilidad ética. Temida a la vez que estimada.)

J. K. T., La conjura de los necios. ¿Dónde lo dejó dicho Chesterton?

Hemerotecas

Yo, por ejemplo a mano, soy uno de esos fascistas: un partidario de la unidad de España que no obligará al Valido a hablar en cristiano amenazándole con un chute de aceite de ricino. (A. Espada, en El Mundo)

Una modesta felicidad: cuando los jóvenes eligen su oficio, cuando los niños juegan. Aparte, oh paradoja, de leer a J. K. T.

Lunes. Ni sí, ni no. Todo lo contrario.

¿Platonismo?

J. Kennedy Toole, La conjura de los necios

Hemerotecas

Domingo, día del señor. Pero. ¿de qué señor? Dios o el diablo, ¿quién lo sabe a la vista de La actualidad?

Hemerotecas

Ramiro de Maeztu, a principios del 36. (Vía diario Córdoba, hoy.)

Hemerotecas

(Al hilo de algo leído en el periódico) No se soporta la filosofía entendida como ética (en el sentido de un código moral más o menos panglossiano). La filosofía como moralina. Por eso se prefiere a los negativistas, a los cínicos en uno u otro grado. Porque no efectúan el salto falaz del es al deben. Registran lo que hay, en la medida de lo posible. Luego... está el postestructuralismo.

Hemerotecas

Lejos de nuestra intención defender los presuntos actos de Zaplana, pero no sé si es obligado castigar de esa manera el real cuerpo de Zaplana.

Te tomarán por tonto. Por lo que eres.

Informes de situación

Ola de calor. Estambul, de O. Pamuk. La conjura de los necios: un título y una política.

Asiduo lector de libros de viajes, o similares. Temeroso de la idea misma de viaje. El libro de viaje como reconocimiento del carácter irredento del hombre.

Thubron, Entre rusos, p. 252