30 de noviembre de 2013

Bibliofilia

Echan por La Sexta una película acerca de un bibliófilo encargado de encontrar un texto demoniaco: La novena puerta, de Román Polanski, 1999. El realizador y el año ya me parecen inquietantes. En fin... Que durante un tiempo estuve enamorado del libro como artículo mágico, tema de novelas exitosas como El nombre de la rosa o, entre nosotros, El club Dumas. Eso fue hace tiempo, y el amor se me fue. No me gustan los libros viejos. O mejor, me gustan los libros viejos en imagen. No los quiero en las manos, me dan alergia. Pero verdaderamente un libro viejo es un objeto bello. En cuanto a la película, la he encontrando por azar, zapeando, y creo que su sustancia se condensa en el tópico, intriga mediante, del chico que encuentra a su par femenino y rubio, con viajes en tren a sitios de prestigio arraigado. El nombre del protagonista es Corso, interpretado por Johnny Depp. La música puntea los acontecimientos, rasgando el ritmo con toques de trompeta. Aunque de vez en cuando se hace el silencio.

Los griegos

Necesitaban las cosas claras, y creían que no se puede saber algo a menos que se entienda realmente, No es un accidente que sus matemáticas no incluyeran ni el 0 ni el ∞, Su palabra para infinito también significaba "lío". (D. Foster Wallace)

Ya puestos...

..., ¿por qué no colocar nidos de ametralladoras? Disuasorias y no agresivas, of course.
Un ‘cachorro’ del PP pide electrificar las vallas de Ceuta y Melilla
Cantidad de barbaridades que es capaz de soltar el personal por su boca o por sus dedos... Si va a llevar razón Platón contra la doxa democrática!

... y 138

Pues eso, la superstición de los números, las marcas y las citas. Como una de D. F. W. de la que quiero y no quiero acordarme.

Las Menas


(detrasdelatiza)

Le plagio, natirelmán, este bello paisaje almeriense.

Escriben

Noviembre permite el resarcimiento del hombre del subsuelo que ha padecido el júbilo estruendoso de la mayoría en la época veraniega, pero que ahora, en los días de luz menguante, consigue vivir más relajado junto a la depresión y el silencio de la masa. El exceso de luz y calor encanalla a los hombres, entregándolos a la exteriorización de sus miserias, a la transmisión de su virus tribal. La obra de justicia que realiza el otoño, y por la cual debería ser reconocida como la mejor época del año, es callar toda esa cogorza banal y dispersa, propiciando una interiorización creativa. Aquel que desee dedicarse al estudio y la meditación no puede dejar de amar este precioso periodo de tiempo. ("Noviembre", horrach)

Con la venda antes de la herida

Con el fin de evitar injuriar a España cada vez que denostamos su gobierno, me atrevo a decir que  en cuestión de sabiduría y prudencia, sentido de la justicia y bondad no he conocido otra igual. Vaya por ejemplo esta medida que aparece en el periódico.
Otro apartado controvertido será el artículo que prevé sanciones de hasta 30.000 euros para quienes intenten impedir el cumplimiento de un acuerdo judicial o administrativo. Ahí entrarían de lleno, por ejemplo, los miembros de los colectivos antideshaucios que, aun actuando sin violencia, podrían ser multados.
Que se *odan los que no pueden pagar su hipoteca... En silencio y soledad, y acatando las sentencias. ¿O es que ellos van a ser unos privilegiados?

29 de noviembre de 2013

Contribuciones bélicas

Sherlock Holmes y la voz del terror (1942) es la particular contribución, cinematográfica, del personaje de Conan Doyle al esfuerzo bélico inglés contra la amenaza nazi en la II GM. El anacronismo de la participación del genial detective se justifica, de modo inmanente, porque, como figura al principio en los títulos de crédito de la película, se trata de un arquetipo eterno, de un mito, en suma. O sea, que vale para un roto y para un descosido. El individualista y cerebral Holmes recurre a la ayuda de los más bajos y equívocos estamentos británicos (no solamente ingleses) para acabar con la conjura y con las amenazas radiofónicas (veremos que el enemigo anida en casa) emitidas por La voz del terror (no La voz de su amo, que es otro asunto, pacífico y respetable). Esto es, que la nación en guerra, funciona como cuerpo, al modo de un organismo en el que valen por igual el alto mando y el pueblo (únicamente se requiere que haya un mediador atractivo; y a fe mía que la actriz es guapa). Un cuerpo, naturalmente, no está libre de producir sus propios gérmenes, o de cobijarlos si vienen de fuera... En fin, que aparte del carácter teatral de esta producción en concreto, del abuso cronológico que implica trasplantar a Holmes & Watson desde la era victoriana hasta el año 1940, no se puede negar el encanto y utilidad histórico-filosóficas y todo eso. En particular a causa del melancólico paralelismo que viene de saber que la lógica pura de Sh. Holmes, heroica y crepuscular, coincide en el tiempo con los esfuerzos de Alan Turing y otros genios de la lógica matemática moderna por desactivar, desencriptando, deconstruyendo, etc. los planes de dominio, Nietzsche, Wagner y toda la tropa en armas, del IIIer. Reich.

Aunque a mí quien me inquieta es von Neumann, un auténtico diablo presente en todos los avatares del maligno: armamento, máquinas, economía. Esto es, en los jinetes aggiornatos de este tiempo.

***

A propósito, vayan estas calificaciones que da Watson a Holmes, a ver si podemos lograr que el detective se saque el título de la ESO por competencias. Cito de la wikipedia, que aunque no es literal sí que me parece bastante fiable en este punto, hasta donde he podido comprobar, que no es mucho (no tengo por aquí Estudio en escarlata, título al que se remite) Rectifico: la wikipedia, o sea el autor del artículo, reproduce, casi, la letra del texto de Conan Doyle:

  • Literatura. — Sensacionalista. (Sin embargo en "El signo de los cuatro" cita a Goethe y a La Rochefoucault, además de mostrar su conocimiento del escritor Jean-Paul). ??? (Interrogación mía.)
  • Filosofía. — Cero.
  • Astronomía. — Cero.
  • Política. — Ligeros.
  • Botánica. — Desiguales. Al corriente sobre la belladona, opio y venenos en general (puede distinguir el lugar de cultivo de la planta, día y tiempo de consumo estudiando una colilla de cigarro). Ignora todo lo referente a los cultivos prácticos y jardinería.
  • Geología. — Conocimientos prácticos, pero limitados. Distingue de un golpe de vista las clases de tierras. Después de sus paseos por Londres puede debido al color y consistencia definir de que parte de toda la ciudad es cada una de las manchas de barro en su pantalón.
  • Química. — Exactos, pero no sistemáticos.
  • Anatomía. — Conocimientos profundos. (??? Me parece que es al revés; que esto es para la química,. y viceversa.)
  • Literatura sensacionalista. — Inmensos. Parece conocer con todo detalle los crímenes perpetrados en el siglo XIX.
  • Música. — Toca bien el violín.
  • Combate. — Experto boxeador y esgrimista de palo y espada. (Sin embargo, en La aventura de la casa deshabitada, de 1901, Sir Arthur Conan Doyle menciona que Holmes tenía algún conocimiento de «baritsu», refiriéndose al bartitsu, arte marcial ecléctico enfocado a la defensa personal que fue desarrollado en Inglaterra entre 1898 y 1902).
  • Leyes. — Tiene conocimientos prácticos de la leyes británicas
  • Finalmente...

    ... el texto se encontraba allí, en algún lugar de la internet. me quedo con este párrafo a modo de (auto)recomendación bibliográfica presente o futura, para mí o mi9s improbables lectores:
    En Proceso a la civilización. La crítica de la modernidad en la historia del cine (Montesinos), /Eduardo/ Subirats se sirve de once clásicos cinematográficos para articular una reflexión sobre la estructura profunda de un siglo XX diseñado bajo el principio rector de la muerte y la desintegración del humanismo: la desarticulación del papel del intelectual como conciencia crítica y la apropiación de las leyes del espectáculo por parte de los mecanismos del poder son algunos de los temas rectores en un texto apasionante que huye de los registros del análisis cinematográfico para reivindicar y explorar el concepto de la kinosofía. El autor define el término como “la reflexión sobre la condición humana en nuestro presente histórico a través del filme considerado como obra de arte reflexiva”.
    A cada uno lo suyo: el texto lo firma Jordi Costa, crítico cinematográfico.

    De todas formas, lo que apunta el mismo crítico, al inicio de este texto/reseña, a mí la verdad es que me da un poco de miedo (no por el libro, naturalmente):
    En su día, las lecturas lacanianas del cine de Hitchcock propuestas por Slavoj Zizek supusieron un gratificante revulsivo para la cinefilia tradicional.
    Zizek, uf! Lacan, reuf! Yo soy un hombre rústico para tales finesses. Si ahora estoy descubriendo a Schopenhauer!

    La portada:



    A título de particular enmienda, yo propongo la gatosofía, aderezada con mochuelo precioso y emblemático y heteróclita mixtura de títulos (vamos, que no he ordenado los libros).

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    Lo que no he encontrado, de momento, es el texto que dedicó Antonio Palerm en le Monde Diplomatique a Vallejo-Nágera, "médico loco" del franquismo...

    Trabajos

    A veces no sabe uno ni qué ni pá qué. Lo único, que no somos ni finlandeses ni coreanos. Para mal, y puede que para bien. No sé. Por fin viernes. De vez en cuando, cada cuatro o cinco años, acabo un libro. Ayer, el de Susan George sobre la derecha laica y religiosa estadounidense, El pensamiento secuestrado, y el de Sebreli, El olvido de la razón. Pero los libros, los escritos por otros, nunca acaban. Quizás yo alguna vez me atreva a escribir algo. Pero para ello debería ser mejor persona y, sobre todo, tener más constancia. Sucede, sin embargo, que tanto para lo uno como para lo otro me pilla ya algo mayor.

    28 de noviembre de 2013

    De Sebreli, ad hominem

    Así se destruye, un texto, una obra, un autor, al denunciar la voluntad, muy mala, execrable, que lo produce. Retóricamente a Sebreli le asiste la razón: cuando sostiene que Schopenhauer no fue más que un reaccionario conservador, y que por lo tanto habría tenido que despreciar a A. H., un amante de la autoridad y del orden que durante los días revolucionarios del 48 prestó sus prismáticos a un oficial para que pudiera disparar, desde su casa, sobre los insurrectos. No sabemos qué escritura puede soportar este rumor, qué paciencia ha de contener este río.


    Si, señor, al nivel de la conjugación astral de ZP y Obama, que dijo la otra

    "La huelga [de limpieza] se ha solucionado gracias a las medidas de la reforma laboral, que permite que se rebaje el coste laboral con unas medidas de flexibilización, y que son las que más progreso han traído en la historia la Humanidad, hagan un recorrido por el mundo", ha sentenciado en respuesta al líder socialista. Y ha añadido que los barrenderos, que cobran entre 500 (el turno del fin de semana) y 1.300 euros, y que ahora verán congelado su salario durante los próximos cuatro años, tienen "el sueldo medio de los madrileños". El sueldo medio en la región son 2.160 euros; en España, son 1.840 euros. ( El País)

    Dóxai

    La pensión máxima subirá 6,3 euros y las mínimas, entre 0,5 y 3 euros el año que viene (República)
    Pues a mí no me parece tan bien, porque luego se gastan el monto de la subida en vicios, como por ejemplo en vino y discotecas.

    Noblesse oblige

    Frente a ello se conjuran hoy la izquierda, los nacionalistas y, por supuesto, los profesores: en cuanto puedan, derogarán la ley. Todos más que indignados, como si los expulsaran del paraíso o como si ellos no tuvieran nada que ver con lo que había, más bien un purgatorio: aquel en que ya fracasaban tres, abandonaban cuatro y se aburrían diez de cada diez alumnos, se vegetaba en PISA y se subutilizaban edificios, instalaciones, equipos y redes. (M. Fernández Enguita, "Entre todos la mataron... ", en El País)
    Los términos ("conjuran"), el modo tenebroso (el anónimo y múltiple "se") de los culpables, la serie de esos mismos culpables (izquierdas, nacionalistas, profesores; de cuya conjunción casi sale un terrorista), el convencimiento sin fisuras ("los profesores", todos y cada uno de los profesores, sustanciados en cuerpo místico y uno). Voilá las trazas del sectarismo medular, siempre oportunista, con cátedra y tribuna, atronadoramente precrítico, señalando como un tío sam de la materia (Sociología, de la Educación) a nadie más que a Ti, Docente, dueño de los fenómenos, cabeza de aquél, chivo para aquello.

    Casi me da miedo seguir: masa, subutilizaban, eso escribe, y nosotros podemos asociar palabras y seguir: infrahombre, subnormal...

    Más positivismo

    En EE UU, el pensamiento positivo se ha colado en las iglesias. Como denuncia Ehrenreich, el primitivo calvinismo que condenaba cualquier goce mundano y llamaba a la austeridad ha dado paso a macroiglesias, con telepredicadores que no solo no esconden su riqueza sino que hacen de la ostentación el centro de la "teología de la prosperidad": Dios premia con riquezas a quien tiene una actitud positiva. Oradores evangelistas como Joyce Meyer, Creflo Dollar, Benny Hinn o el matrimonio Copeland vuelan en aviones privados y han amasado fortunas con ese mensaje. (Escrito por el periodista; el artículo es de 2011)

    Lo siguiente, escrito por Ehrenreich:

    "El pensamiento positivo es en realidad un brillante método de control social, ya que anima a la gente a pensar que no hay nada malo en el sistema (la economía, la contaminación ambiental). Y que lo que está mal tiene que ver con usted, con la actitud personal de cada uno".

    Pensamiento positivo, palabra de Ehrenreich

    "Había gente a la que habían echado del trabajo y que se dirigía cuesta abajo y sin frenos hacia la pobreza, a la que se decía que debía ver su situación como una oportunidad digna de ser bienvenida. También en este caso el resultado que nos prometían era una especie de cura; la persona que pensaba en positivo no solo se sentiría mejor mientras buscaba trabajo, sino que para ella ese trámite acabaría antes y más felizmente". (De aquí)
    Palabras:
     El positivismo como ideología también prende en España. En el ámbito político, el presidente del Ejecutivo, José Luis Rodríguez Zapatero, ha hecho del optimismo la misma razón de su Gobierno. Desde su famosa negación de la crisis ("No estamos en crisis. Solo tenemos alguna dificultad que nos viene de fuera" (7 de febrero de 2008), a sus reiteradas acusaciones de "antipatriotas" a los que alertaban sobre ella o aquella categórica advertencia cuando el paro comenzó a desbocarse: "El pesimismo no crea ningún puesto de trabajo" (1 de junio de 2008). Su optimismo tampoco parece que haya servido de mucho. Desde que pronunciara esa frase, el número de parados se ha incrementado en dos millones y medio.
    Lo anterior lo escribe el periodista de El País. Pero "positivismo" sostiene la RAE que es lo siguiente:

    1. m. Tendencia a valorar preferentemente los aspectos materiales de la realidad.
    2. m. Afición excesiva a comodidades y goces materiales.
    3. m. Actitud práctica.
    4. m. Sistema filosófico que admite únicamente el método experimental y rechaza toda noción a priori y todo concepto universal y absoluto.
     Mientras que la bandera de Brasil, con escudo, es esta: