28 de agosto de 2010

Karl B.

¿Quién puede resistirse a la tentación de utilizar el Diario como tribuna de expresión o apelación? Yo, aunque me cuesta. La entrada de Diario debe limitarse a referir un mínimo, soslayando el yo lo máximo posible. La persona no tiene que exponerse en lo escrito, sino permanecer por detrás o por delante de la letra (esto sería anticiparse).

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Cambio de tercio: diez o doce grados menos que ayer, por lo menos. El cielo totalmente cubierto y gris. Dolor de cabeza-barómetro. (Necesidad de los juicios de hecho: ¿lloverá? Sintético a posteriori.)

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