Nos hemos autoimpuesto no contestar públicamente a las barbaridades
médicas, legales y políticas que se dicen y hacen en nombre de la salud y
de un malentendido rol del buen ciudadano. Pero en nuestro fuero
interior permanece la llama del conocimiento de esas inconsistencias y
contradicciones que negamos de puertas hacia fuera. Y esa disputa entre
la verdad confesada y la que albergamos en lo más profundo de nuestro
ser nos está consumiendo individual y socialmente (...) Intentamos reformular la indignación que nos genera el engaño en razonables preguntas, pero la única respuesta que recibimos es terror. El eslogan de la sexta ola
es que vivir contagia, que vivir puede matarnos y matar, así que toca
transformar nuestra existencia en una prisión de alta seguridad en la
que imperen la burocracia y los horarios. Nos han inoculado un miedo y
una histeria que nos están consumiendo mentalmente. Esta extenuación es
el elefante en la habitación que nadie quiere ver, la desnudez del rey
que la corte no se atreve a mencionar. (G. Sánchez, en El Subjetivo)
Blogger me avisa de que las leyes europeas, Dios las bendiga, me obligan a que avise a mis improbables visitantes y/o lectores de que mi blog usa cookies, pero a mí su aviso, incompetencia mía, seguro, no se me pone en la cabecera
22 de diciembre de 2021
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario