8 de abril de 2012

Nótulas

Los ensayos de Coetzee sobre literatura son magníficos. (En Debolsillo se los puede encontrar a precio de crisis.)

No me interesa la novela. Sí las novelizaciones practicadas en la memoria autobiográfica (acto abierto al público). Quizá por ser un trilero.

Más de uno sufrimos el síndrome de Sergio García.

Si se pone un plazo al alto el fuego, se está dando carta blanca para matar a destajo.

En el humor, la conciencia lingüística asume la dificultad de decirse por completo.

En la santa trinidad del verso "moderno" (Pessoa, Pavese, Kavafis), de la que hablamos ayer, pusimos un escalón por encima a Pessoa. Mi opinión: en los dos últimos hay poemas maravillosos, en el primero una actitud. A modo de voto particular propuse a Wallace Stevens.

(Pragmática) Una filosofía lingüística orientada a las intenciones quiere y no quiere pronunciar el nombre de la libertad.

No sabemos lo que queremos, luego paseamos.

2 comentarios:

hegoficcion dijo...

Buscaré al Wallace Stevens

Martín López dijo...

Yo empezaría por La roca, o por sus poemas últimos, cuando ya era setentón a punto de morir.