Aprendí a ordenar, y con ello aprendí a ser, cuando comprendí que la sabia disposición de las cosas -de las pocas necesarias- viene del rechazo de la mayor parte de ellas (cantidad y calidad en proporciones inversas)..
La mirada que intelige ha menester de espacios vacíos.
El entendimiento que se desplaza localiza sus ideas..
No hay comentarios:
Publicar un comentario