Las cosas que no son en el mundo son muchas más que las que son. De lo cual se infiere justamente lo contrario: la superioridad cuantitativa del ser sobre el no-ser. Incluso , si fuéramos atrevidos, su preeminencia sobre la nada. ¿La presencia dominante de un dios en la tierra del diablo, como en esa película brasileña de G. R.?
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