18 de mayo de 2012

Escribir en tercera persona a fin de no nombrarse

De la locura no se libra el hombre moderno a través de las grandes ideas, esos nombres que se escriben con mayúsculas. Lo hace mediante las tareas de la intendencia doméstica: cocinar su comida, hacer su colada, arreglar la cama, fregar la cocina. Asuntos así.

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Por otra parte,

este texto de Gabriel Jackson. Friedman Vs. Keynes---

1 comentario:

Juan Fco Romero del Castillo dijo...

De lo que se deduce que vamos a peor. Y todo por los comunistas, que se dejaron tirar el telón