Este espíritu burgués apasionado por toda empresa –sea grande o pequeña, en el propio país o allende los vastos océanos-, este amor al bienestar conservado con esmero e higiene; ese íntimo goce, ese orgullo que nace del sentimiento de debérselo todo a la propia actividad […] Esta serenidad de un placer merecido penetra y anima los cuadros de fiesta campestre, tabernas, bodas y danzas, prestándoles un sentimiento de libertad y abandono, fruición de una vitalidad animada y despierta". (Hegel, a propósito de la pintura holandesa del XVII; cita A. Escohotado en Libertad digital)
Blogger me avisa de que las leyes europeas, Dios las bendiga, me obligan a que avise a mis improbables visitantes y/o lectores de que mi blog usa cookies, pero a mí su aviso, incompetencia mía, seguro, no se me pone en la cabecera
23 de abril de 2018
Hemerotecas
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