... al leer al principio de la novela sobre esa torre en la que vivía el joven protagonista, Stephan Dedalus, me imaginé una especie de mundo medieval de castillos y torres, con los coches y aviones de la década de 1920, poblado por hombres jóvenes que citaban obras en latín y griego; en otras palabras, algo infinitamente lejano al mundo en el que me encontraba, con sus muelles y barcos pesqueros, sus montañas escarpadas y su mar helado, sus pescadores y obreros, sus programas de televisión y sus enormes equipos estéreo en los coches. (Karl Ove Knausgård, en Babelia, hoy)
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11 de junio de 2016
Hemerotecas; Joyce
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