9 de agosto de 2015

Leo paginas de un libro de un señor muy reaccionario (periodista y más cosas) que denigra el arte contemporáneo. Le puedo seguir, creo, en los tópicos y en el argumentario, en general. Esto es, que fundamentalmente estoy de acuerdo con él. Temo, eso sí, que pretenda demostrar que la ausencia de absolutos metafísicos sea la causa radical de este despendole estético-cultural. Epocal, para qué vamos a andarnos con medias o cuartas tintas.

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