31 de diciembre de 2011

Pues eso, don Antonio, pues eso mismo...

... era lo que pensaba yo a propósito de los novelistas españoles actuales. Parece injusto, pero en realidad les salvo. La literatura es la cortesía que la inteligencia concede al acontecimiento, a la trama de acontecimientos que tejen lo que decimos con el término verdad. La cortesía aplicada a la ficción del hecho se acaba cuando la novela se olvida, y la novela se olvidará. Pero la pulsión de conocimiento y reconocimiento de lo que son los seres humanos a través de lo que los seres humanos han hecho, la Historia, no dejará de alabar la claridad y valor de los testimonios. ¿Quién mejor para lanzarlos al futuro que el periodista metido a literato, o el literato metido a periodista?

No hay comentarios: