27 de julio de 2011

Del tiempo

I.

La fotografía, Castellanos., col. Vicente Camacho, de las campesinas manchegas segando un campo de trigo. (vid. Del campo a la ciudad, II. La mirada del tiempo, El País, pp. 46-47)

¿Debemos pensar en Millet? Sí, es obligado.



II.

El sanatorio antituberculoso de Davos, en el relato de Shalámov "La medalla de oro" (4º vol. de los Relatos de Kolimá, p. 231). Hans Castorp, sin palabras. No más palabras al respecto. Admiración pura. Reconocimiento y gratitud. Amor sin freno.



"Los interminables pasillos del sanatorio de Davos han quedado desiertos. Las aguas de las enormes piscinas muestran una superficie inmóvil; algunas de las blanquecinas paredes todavía ostentan afiches publicitarios de los años treinta y, también, múltiples referencias literarias provenientes de la novela que inmortalizó el lugar, reflexiones del joven Hans Castorp, el personaje creado por Mann, que llegó al hospital de montaña para internarse por tres semanas y permaneció siete años: su peripecia en la clínica, desarrollada a lo largo de mil páginas (generalmente agrupadas en dos volúmenes), conforman su recorrido por una sociedad sufriente; Castorp se debate en su ansia de conocimiento como en una novela de iniciación (el clásico Bildungsroman) en su vocación por desentrañar el misterio de la encarnación del espíritu frente a la naturaleza. La especulación filosófica en torno de la enfermedad y de la muerte se imbrica, por medio de diálogos con internados y visitantes, en lo social y lo político. " (N. Tirri)

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