Quien no ame la filosofía será incapaz de entender a Hegel. Puede que esto no le importe lo más mínimo, pero le debe quedar claro que existe como poco una experiencia que se le niega.
No pregunte si yo lo entiendo, porque: a) no se trata de esa cuestión (la filosofía no se rige por el ytumás ni por el ytumenos), b) demostrará que no ha entendido lo que yo quiero señalar: que hay (puede haberlo) un amor en quien acepta una carencia, y que hay una carencia inadvertida en quien no acepta un amor (a Sofía).
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