9 de mayo de 2014

Esa bendita objetividad :
Las hormigas , que el señor Geiser ha observado hace poco bajo un abeto que goteaba, no dan ninguna importancia al hecho de que uno no sepa cosas sobre ellas; tampoco los saurios, que se han extinguido antes de que ningún ser humano haya podido verlos. Todas las hojas / de los libros, de donde se han recortado /, tanto si están en la pared cono si están en la alfombra, pueden desaparecer. (Max Frisch, El hombre aparece en el Holoceno; pero prosigue el señor Geiser: ¡Qué quiere decir Holoceno! A la naturaleza no le hacen falta nombres. Esto lo sabe el señor Geiser. Las piedras no necesitan que él se acuerde de ellas.)

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