Naphta y Settembrini

Thomas Mann, trasladando a la ficción, en el personaje del jesuita Naphta, la voracidad ideológica de G. Lukács, anticipó un episodio real, más de veinte años después de la novela de Mann: G. Lukács destrozó, en una crítica, los tomos que Márai dedicó al período hitleriano. La base de la crítica: una interpretación paranoica de que, entre líneas, Márai escribía contra los comunistas. Lo refiere Coetzee (Mecanismos internos, pp. 124-125). (No entiendo la ojeriza que le manifiesta Coetzee, sin apenas reprimirse, a nuestro buen burgués húngaro y perfecto mittleuropeo. Es como querer rematar a la UCD ahora, a causa del desastre presente.)