... , tan a/pegado al tiempo siente miedo: el tiempo y el río no le pertenecen a uno, son el discurrir de otro: no de un sentido oculto -verdad para ser desvelada-, sino la diferencia o corte interior, la distancia abismal entre yo y yo, entre razón y experiencia. También un kantiano escribe diarios, en la clave ortodoxa: el dios de K. con nosotros---
Escritura de diario/s: entre lo que pienso para escribir -a veces soñado o semisoñado- y lo que realmente escribo media la suficiente distancia (desafortunadamente el pensamiento siempre llega un poco antes que la expresión) que el resultado nunca deja conforme. A quién? A mí, claro, al lector!
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