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Esta noche, en La 2, un programa sobre Jorge Semprún, que habrá que ver... De fondo, no le presto mucha atención, entretenido en otras cuestiones. Pero por lo poco que atiendo y oigo, se encuentran ahí, en esa vida y pasión, materia para graves reflexiones morales.

El documental aparece en el programa Imprescindibles, que no conocía, a pesar de su nombre y de que a mí no se me escapa nada. Repasando la lista de las emisiones disponible en la web de rtve me encuentro con un programa dedicado a Roberto Bolaño, que, con el título de El último maldito, se emitió en octubre de 2010. Pues que también habrá que asomarse, deo volente.

Como quien no quiere la cosa, llego, a través del documental sobre el escritor chileno, a los textos en los que el mexicano Juan Villoro echa pestes de la sociedad de la internet.

Extasiado con el documental, con la música, las imágenes, las palabras. Lo más literario de Bolaño puede que sea Bolaño mismo, como una escritura indistinta de la vida, una existencia inscrita. Qué más da, queda la convicción de que se puede obtener felicidad aún en las circunstancias más adversas, si se posee, y se ejerce con contundencia, la voluntad de decir, contar, escribir.


La imagen, aquí.