"El hombre hobbesiano merodea las calles, a plena luz, con cabello reluciente."
La ciudad peligra...
Nietzsche continuamente en la sombra: la bestia rubia y la sospecha de que N. fuera el bautista de H.
***
Vivíamos suspendidos del aire, conformados de su misma materia,
Una mañana vimos, a pocos metros sobre el suelo, una bandada de pájaros negros, rasando casi la banda asfáltica cuando cruzó por delante de nuestros ojos.
No hay comentarios:
Publicar un comentario