5 de noviembre de 2009

Qué fácil lo tiene el platonismo!

Los problemas no se buscan, se encuentran.

Intelijencia, dame el nombre exacto de las cosas.

Ergo: podré disolver una cuestión si encuentro un nombre, un sortilegio. La intelijencia, al poner un nombre, endiosa a uno de los aspectos del conjunto (problemático). Esconde lo más, y a esa mentira así fabricada la denomina Idea---

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(¿From Kafka to Plato?) Siéntate y espera justicia para ti, a ver si la puerta se abre y luego te enteras de para quién era, cuando ya sea tarde y no tenga remedio. Siéntate y no emprendas el camino arduo hacia la luz que viene de fuera.

Viendo la escritura torcida del mundo, tal parece que un dios malvado va soltando con rabia los renglones, no sabría yo si pensar en fiarme de esa musa de las mentiras que da consejos para hacer un mal que se convierta en bien.

O quebrantar la correspondencia de habla y ser.

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Chuck Berry en Flor de pasión de radio 3.

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No fui justo cuando me hablaron de este artículo del profesor Laporta. Ahora lo he leído y respeto su autoridad.

1 comentario:

Egoficción dijo...

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