Mente, mundo y lenguaje. Y si la primera se reduce a cerebro, y el yo puro a redes de neuronas, conocer cómo engrana el cerebro con el mundo del que el cerebro forma parte. Es decir, el antiguo problema de la verdad como correspondencia. Pero, ¿correspondencia de qué?
Por mi parte, mi cerebro casa muy mal con lo real. Por excesos de dudas o por exceso de ruido.
What´s up?
No hay comentarios:
Publicar un comentario