De los sistemas escolares.
Intenta uno ganarse el pan explicando un par de frgs. de esa criba filosófica que es El ocaso de los ídolos y consigue ser atendido por, aprox., un 5% de los asistentes. El resto, de vacaciones. Igual la culpa es mía por el sacrilegio de trabajar con estas cosas (ideas, textos, comentarios). Lo acepto. Pero que no digan que el hombre padece el veneno de la curiosidad. El más amodorrante de la estulticia, sí.
No hay comentarios:
Publicar un comentario