Eugnosia mejor que eugenesia...
"/U/n Tribunal definidor del pensamiento sano y del mefítico, que prevenga en lugar de remediar". Un Tribunal crítico (discriminador) es lo que parece solicitar A. V. N., de quien son las palabras entrecomilladas. Cito de R. Huertas, Los médicos de la mente, p. 95. Las metáforas las carga el católico: buena idea, salud del alma. Si hace falta se enlaza con la salud del cuerpo, con la tipología a mano del teutón Kretschmer, fugado de los nazis, defensor de la bondad de la mixtura de razas, tan lejos del racismo hispánico, ultra, de A. V. N. En la breve bibliografía final del libro de Huertas (Nivola, 2002) se recoge la falta de biografías del personaje. A lo más, acercamientos sesgados y parciales a su figura. Estamos en 2013. Hum. No creo que nadie se haya atrevido. Un apunte: la tesis doctoral de A. V. N., leída en 1929, después de una ya larga carrera militar y de aprendizaje más o menos libre de la psiquiatría en Alemania (había aprendido alemán por su cuenta mientras estaba destinado como oficial médico en Marruecos) versaba sobre lo que era una obsesión intelectual suya, al parecer: la simulación de las enfermedades mentales. Seguramente de su trabajo doctoral procede su libro La simulación de la enfermedad (1934).
Si no tuviera el convencimiento foucaultiano de la vecindad moderna entre definición de la razón y definición de la locura, como de un intramuros y extramuros de la conciencia, la libertad, etc. pensaría que estoy perdiendo el tiempo, y que un monárquico algo o mucho zumbado psiquiatra próximo al ideario de Ramiro de Maeztu (otra víctima de la guerra incivil) no merece que yo, a mi vez, me obsesione demasiado. Eppur...
(No he hecho otra cosa, en esta entrada, más que citar o resumir lo que leído esta tarde en Murcia, mientras hacía tiempo para venirme, del libro de Huertas. Básicamente.)
***
Del título Locos egregios, que yo creía que se trataba de una atribución falsa al padre de un libro de igual título del hijo (ya es gana poner la misma rúbrica) veo en iberlibro que existe, a estas horas, un ejemplar a la venta, en una librería argentina. Me llama la atención el subtítulo, que en algo ayuda a comprender la teoría y la praxis del comandante psiquiatra en su tiempo: "Una visita al gran manicomio de figuras históricas para aprender psiquiatría en ejemplos". La portada del libro se encuentra reproducida en el libro de Huertas, con algunos comentarios, bastante críticos, sobre el acercamiento psiquiátrico-histórico de V. N. a los genios y sus trastornos mentales de base.
(No he hecho otra cosa, en esta entrada, más que citar o resumir lo que leído esta tarde en Murcia, mientras hacía tiempo para venirme, del libro de Huertas. Básicamente.)
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Del título Locos egregios, que yo creía que se trataba de una atribución falsa al padre de un libro de igual título del hijo (ya es gana poner la misma rúbrica) veo en iberlibro que existe, a estas horas, un ejemplar a la venta, en una librería argentina. Me llama la atención el subtítulo, que en algo ayuda a comprender la teoría y la praxis del comandante psiquiatra en su tiempo: "Una visita al gran manicomio de figuras históricas para aprender psiquiatría en ejemplos". La portada del libro se encuentra reproducida en el libro de Huertas, con algunos comentarios, bastante críticos, sobre el acercamiento psiquiátrico-histórico de V. N. a los genios y sus trastornos mentales de base.
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