6 de febrero de 2011

Confesión secreta

Juego con las palabras, y sí, a veces obtengo una parva ganancia. Yo mismo me lo creo y yo mismo no me lo he de desmentir. Entonces, no será del todo tan extraño que esas mismas palabras a veces se resistan, me traicionen o les sea infiel yo a ellas.

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http://jmridao.blogspot.com/2011/02/apuntes-lx-pessoa-una-semblanza.html

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Una vez que empiezas a leer a Ramón y Cajal (Reglas... ), ya no podrás dejarlo. Únese en la experiencia la sabia cazurrería aragonesa y muy notables atisbos del popperianismo metodológico. Haga Vd. la experiencia y me cuenta.

1 comentario:

José Miguel Ridao dijo...

Se trata de un juego en el que todo vale, con tal de que se emita luz, aunque sea un poquito, y si esa luz seduce al contemplarse mucho mejor.

Y muchas gracias por tantos enlaces.