De la locura no se libra el hombre moderno a través de las grandes ideas, esos nombres que se escriben con mayúsculas. Lo hace mediante las tareas de la intendencia doméstica: cocinar su comida, hacer su colada, arreglar la cama, fregar la cocina. Asuntos así.
***
Por otra parte,
este texto de Gabriel Jackson. Friedman Vs. Keynes---
1 comentario:
De lo que se deduce que vamos a peor. Y todo por los comunistas, que se dejaron tirar el telón
Publicar un comentario