2 de febrero de 2012

Demagogia pura

Un Estado que consiente que sus gentes duerman en la calle y pasen hambre ha olvidado aquel principio básico de la convivencialidad que el Maestro nombraba como philía.

Al joven que pregunta, satisfecho y jocundo, para qué sirve la filosofía habrá que contestarle que para nada, que quizás él sí que sirve. Y esperar que algún día descubra el significado de la palabra señor.

3 comentarios:

Anónimo dijo...

Lo ilógico es pensar que esos nuestros señores representantes conozca a Illich y menos en que consiste su philía.
Por el joven, ni preocuparse, pronto se dará cuenta que la filosofía no es otra cosa que la vida.

Juan Fco Romero del Castillo dijo...

Habría que preguntarse que para qué sirve el alumno

Anónimo dijo...

Para servir, o para servil.