En algunos campamentos los hombres de Yerkes fueron acogidos con hostilidad; en otros tuvieron que soportar un castigo en muchos aspectos más penoso: recibieron un trato cortés, sus requerimientos fueron debidamente atendidos, y luego nadie hizo caso de ellos. (S. J. Gould, op. cit., p. 289)Noblesse oblige: como ya he venido citando muchas veces, debo decir que el libro del malogrado biólogo me parece extraordinario y de lectura obligada (algún pequeño desliz en la traducción; lo cual no es difícil en un texto que se va a las 600 páginas). Vamos a hacerle publicidad a la editorial Crítica.
Blogger me avisa de que las leyes europeas, Dios las bendiga, me obligan a que avise a mis improbables visitantes y/o lectores de que mi blog usa cookies, pero a mí su aviso, incompetencia mía, seguro, no se me pone en la cabecera
9 de abril de 2013
¿Un ejemplo para tomar?
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1 comentario:
No diga vd. malogrado, caramba. El hombre simplemente se murió. Como todo el mundo.
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