Ya no sé muy bien lo que leo ni lo que escucho.

Peter Laslett: apasionante pesquisa filológico-detectivesca acerca del momento y orden cronológico de los Tratados..., primero y segundo, sobre política de John Locke. El caballero (Laslett), debe ser muy inteligente, e igual hasta lleva razón al suponer que Locke compuso el Primer Tratado (una parte sustancial del cual se ha perdido), el dedicado a la refutación de Robert Filmer (reaccionario, aunque portavoz del sentido común acerca de que un estado de naturaleza ni ha existido ni existirá jamás de los jamases), después de componer el Segundo..., y que los títulos de “primero” y “segundo” obedecen a componendas editoriales. Ahora bien, consigue poner de manifiesto una de las virtudes de la filología en sus momentos más excelsos: la invitación a la no-lectura, inclusive aborrecimiento, del tema o libro que estudia.

Empezando con el estudio de Leo Strauss sobre el Tratado teológico-político de Spinoza (en La persecución y el arte de escribir). Con Mr. (Herr Dr.) L. S., siempre me pasa que sé que no sé... y sé lo que me digo.