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25 de mayo de 2010
Bauman, sobre la modernidad
Hay dos formas de la moralidad burocrática, creo. Z. Bauman plantea, en principio y nada más, la sustitución de una moral "pasada de moda" por el ajuste del comportamiento personal a los requisitos de la organización, a los dictámenes de la autoridad que la dirige. Se entiende que en esa concordancia de la conducta privada con el mandato que viene de fuera está el bien, el bien de moda (podríamos señalar). Habría, por otra parte, y ahí me sitúo yo personalmente (con las excepciones de fingidor), un ajuste negativo, un temor a la autoridad, que no busca ahora complacerla; que ha trasladado, antes que nada, la mala conciencia desde el interior al terreno del incumplimiento de unas tareas establecidas; un incumplimiento del que no se sabría dar adecuada razón. A no ser cierto temperamento walseriano, o bartlebyano...
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