Platonismos. Creo que la utilidad de la utopía platónica es
fundamentalmente negativa. No hace falta aceptar el conjunto entero acerca de su
premisas, sus juicios de valor. Basta con su papel de negador de lo existente.
Concibamos la idea como un ideal. De lo que era sustancia obtenemos una
regulación sine die, moderna. El trecho que va de Atenas a Königsberg. Más de dos mil años pensando en lo mismo. El hombre y la ciudad. En fin, que llegamos
al platonismo como a dios, via negationis.
Bien. No es difícil que los seres humanos acepten la
autoridad. En eso confiaba el maestro. Persuasión. Mentiras útiles quizás. Lo
difícil es que acepten el nexo entre poder político y dinero. A través de esta
vía antieejemplar también se caen las democracias.
No hay comentarios:
Publicar un comentario